Canciones a Caracas: Emociones y swing
Articulista, copywriter e instructora de yoga en formación.
Las canciones representan la historia de nuestros antepasados, los sentires que los habitaron y llevaron al momento creativo para dejarnos hoy piezas musicales que escuchamos con emoción.
Pensar en Caracas es dejarnos trastocar el ser por El Ávila para aliviarnos de la carga cotidiana y hacernos sentir parte de la madre tierra. Pensar en Caracas es observar el paso de su gente apresurada, aunque cálida, que te regala un cafecito cuando pisas la entrada de su casa: que, claro, también es tuya. Pensar en Caracas es oír bocinas desesperadas por llegar rápido a su destino; es también el canto de las guacharacas, la visita de las guacamayas que nos convidan su compañía a cambio de un poco de fruta. Y definitivamente, pensar en Caracas es ver todas estas expresiones culturales reflejadas en las letras de sus canciones, porque esta ciudad sí que ha tenido quien le cante.
Es una aventura adentrarse a explorar las distintas expresiones musicales que ha inspirado una ciudad tan hermosa como bucólica. Y ahí, en las canciones a Caracas, yacen las venas abiertas de lo que esencialmente somos.
Cerro Ávila
Voy de Petare rumbo a la Pastora
contemplando la montaña que decora mi ciudad
llevando matices de la buena aurora
con la fauna y con la flora de un antaño sin igual
y sabe Dios los pintores, las paletas,
cuánta pluma del poeta,
cuántos ojos encontraron un momento de solaz(…)
Inevitable, Ilan recurrió al recurso de la vista de la montaña, que puede verse casi desde cualquier parte de la ciudad; y es que El Ávila regala un perfecto contraste entre una metrópoli (que la de ese entonces, era la Caracas del 69) y un paisaje con una paleta de verdes y azules de nuestras serranías. En definitiva, se convirtió en un himno para los caraqueños.
Caraqueñas
Las canciones de Guaco se caracterizan por una peculiar jocosidad y por la facilidad que tienen de hacerte parar de la silla en las reuniones familiares (como venezolanos que son y enamorados de sus mujeres, nos regalan esta pieza para homenajearlas y resaltar su belleza que a todo el mundo arrebata).
Y dice:
No sé que tienen las chicas lindas
Que de Caracas
Con su caminar tan sabrosón
A todo el mundo arrebata
Cuando las miro al pasar
El cuerpo se me estremece
No puedo hablar solo mirar
Pues mudo quedé
Y si las miro otra vez me moriré
Y con esos venezolanismos del español, los músicos nos hacen reír con esa picardía y buen humor que los caracteriza para enaltecer la figura femenina y las cualidades que las representan, mientras en el fondo se oye su sabroso pop latino.
Caminando por Caracas
Esta, que es una de mis favoritas, es interpretada por el cantautor Piero, que es de origen italiano, aunque radica en Argentina. La canción es la combinación de su voz apacible con la melodía del pop latino de los 60’s y le hace el juego perfecto con la letra poco extensa, pero melodiosa.
Caracas, Caracas, el Ávila, el Guaire
El Pulpo, La Araña, tu Sabana Grande
Ya los siento míos, ya los siento míos, ya los siento míos
Ché Caracas…
Y con un «ché» argentino, homenajea a la ciudad que le dió cobijo en sus conciertos y le hizo sentir pertenencia; algo que, bien nosotros sabemos, nos caracteriza como venezolanos. Tanto sus mujeres como sus paisajes naturales lo cautivaron.
Todavía quedan muchos más homenajes artísticos que mostrar, porque como dice nuestra poeta Claudia Noguera, «Caracas nunca pierde, no deja de latir» y siempre tendrá quien le cante.