Los orígenes de Caracas en una pintura y un mapa
Pedro Centeno Vallenilla (1899-1988) fue uno de los principales pintores venezolanos del siglo XX. En su abundante obra mezcló academicismo y simbolismo para expresar una visión épica de la historia de Venezuela, con especial énfasis en su pasado indígena y los próceres independentistas. Su cuadro “motivos plásticos de la fundación de Caracas”, reproducido debajo de estas líneas, sintetiza de modo simbólico los primeros diez años de historia de la actual capital venezolana, de cuyo nacimiento se cumplen 453 años este 25 de julio.
Sirvámonos de esta pintura para hacer un breve repaso a los orígenes de la otrora “ciudad de los techos rojos”.
San Francisco
En el centro del cuadro de Centeno Vallenilla figuran tres imágenes de los santos bajo cuya advocación o protección se fundó (o intentó fundar) Caracas. El que luce barba y tonsura es san Francisco de Asís, quien vivió en el siglo XIII y creó la orden franciscana.
En 1560 arribó al valle de Caracas en misión colonizadora Francisco Fajardo, un mestizo nacido en Margarita e hijo de un capitán español y una cacica guaiquerí. En los espacios del actual Fuerte Tiuna, Fajardo fundó una propiedad agrícola llamada “hato San Francisco”, considerado el primer germen de Caracas.
Poco después, el español Juan Rodríguez Suárez intentó conformar allí la villa de San Francisco. Por desgracias, ambas tentativas fracasaron al poco tiempo por la presión de los indígenas locales.
San Sebastián
Junto a San Francisco, figura en la pintura de Vallenilla un joven imberbe traspasado por flechas. Se trata de San Sebastián, un soldado romano del siglo IV que murió martirizado a flechazos por su fe cristiana.
En 1567 salió de El Tocuyo (estado Lara) una expedición encabezada por el español Diego de Losada con el propósito de someter a los indígenas del valle de Caracas y consolidar la fundación de una ciudad. La empresa se encomendó a san Sebastián como protección contra las flechas de los nativos.
Asimismo, la primera iglesia que se construyó en Caracas (y en la que se celebró la primera misa de la ciudad), fue la ermita de san Sebastián, hoy desaparecida. En su lugar se alza actualmente la Santa Capilla.
Santiago el Mayor
Por último, en la esquina inferior izquierda del cuadro que nos ocupa puede apreciarse una pequeña estatua ecuestre de bronce que representa a Santiago el Mayor, uno de los doce apóstoles de Jesucristo y patrono de España. Su fiesta se celebra el 25 de julio
A diferencia de Fajardo y Suárez, Diego de Losada tuvo éxito en someter a los belicosos indígenas del valle de Caracas (en especial al célebre cacique Guaicaipuro), lo que trajo como consecuencia la fundación de Santiago de León de Caracas, actual capital de Venezuela.
Curiosamente, aunque la fecha tradicional de este evento es el 25 de julio, el día exacto de la fundación de Caracas se desconoce. Dice al respecto el historiador José Oviedo y Baños: “El día en que Losada ejecutó esta función es tan ignorado en lo presente, que no han bastado mis diligencias para averiguarlo con certeza, pues ni hay persona anciana que lo sepa, ni archivo antiguo que lo diga”.
Con respecto al nombre de la ciudad, suele admitirse que el “León” alude a Pedro Ponce de León, entonces gobernador de la provincia de Venezuela, y “Caracas” quizás provenga del nombre de cierto tipo de yerba abundante en el valle, también conocida como bledo o amaranto.
El primer mapa
Caracas no tuvo su primer mapa hasta una década después de su fundación. En 1577, atendiendo a una orden del rey Felipe II, el gobernador Juan de Pimentel envió a España una “relación de la descripción de la provincia de Caracas”, en la que ofrecía un detallado informe sobre el territorio a su cargo.
El documento incluía un dibujo a pluma “rasguñado en un papel” de 43 x 60 centímetros que representaba a la entonces pequeña ciudad de Caracas, dispuesta como un damero de 24 manzanas en torno a la plaza mayor, actual Plaza Bolívar.
El diseño del mapa es obra de Diego de Henares Lezama, fundador de Caracas junto a Diego de Losada y uno de los primeros alcaldes de la ciudad.
Según el diccionario de Empresas Polar, en aquellos años finales del siglo XVI Caracas contaba con apenas dos mil habitantes.
En su informe, Juan de Pimentel explica que “el edificio de las casas de esta ciudad ha sido y es de madera, palos hincados y cubierta de paja; la más que hay ahora en esta ciudad de Santiago son de tapias, sin alto ninguno y cubiertas de cogollos de caña, de dos o tres años a esta parte se han comenzado a labrar tres o cuatro casas de piedra y ladrillo y cal y tapería con sus altos cubiertos de teja, son razonables y están acabadas la iglesia y tres casas de esta manera, y los materiales los hay aquí”.
El plano original se custodia actualmente en el Archivo General de Indias en Sevilla, España, mientras que en el concejo municipal de Caracas se exhibe una copia realizada a comienzos del siglo XX por Antonio Muñoz Ruiz.