Nombres de las estaciones del Metro de Caracas y sus orígenes
El Metro de Caracas se ha convertido desde su inauguración, el 2 de enero de 1983, en el principal sistema de transporte de la capital venezolana. Llevando día a día a miles de caraqueños a su destino entre las diversas estaciones con nombres un poco fuera de lo común. Los nombres de las estaciones del Metro de Caracas y sus orígenes ya dejará de ser un misterio para ti aquí.
Propatria
Este lugar era una zona común para gente trabajadora al ser un sitio con un gran número de tenerías y fábricas. Muchos de los trabajadores venían desde el interior de nuestro país por lo cual se creó el Sindicato de Trabajadores Propatria, en honor a las veredas de casas con el mismo nombre.
Gato Negro
Muchos necesitamos un punto de referencia cuando no conocemos un lugar, ¿cierto? Bueno, este es el caso. Antiguamente había una taberna y su emblema era un gato negro, por lo cual las personas lo utilizaban como punto de referencia para quienes transitaban por la zona sin conocer; así mismo también funcionaba como un punto de encuentro entre las mismas personas.
El Silencio
Esta es la más fuera de lo común en mi opinión. El lugar antes era llamado El Tarangal, una zona que estaba habitada por gente muy inmoral. El sacerdote José de Carabante al ver cómo eran los habitantes de la zona, echó una maldición: una peste que acabó con todas las personas y el lugar quedó en completo silencio.
Petare
Una de las estaciones más conocidas por los caraqueños tiene por nombre “Petare” que en realidad significa “lugar de cara al río”, ya que anteriormente era una zona donde se practicaba la agricultura y por ser rodeada por el Guaire, gozaba de tierras fértiles.
Sabana Grande
Caraqueño que se respete ha pasado aunque sea una vez por este lugar. Hace muchos años atrás, esta zona tenía un gran parecido con la gran sabana, así que en honor a ésta el sector fue llamado Calle Real de Sabana Grande, para luego pasar a ser solo Sabana Grande. Creo que este nombre es el más obvio.
Estas son solo algunas de las tantas estaciones que recorremos a diario en el metro, nunca está de más saber el origen del nombre de los lugares que frecuentamos a menudo. No solo nos da información útil, sino también nos da un paso para imaginar cómo eran esos sitios muchos años atrás.
¿Cuál es tu reacción?