Caneo Arguinzones: La facultad mágica de estremecer la palabra
Articulista, copywriter e instructora de yoga en formación.
Caneo Arguinzones (1987 – 2014) fue poeta, estudiante de Letras de la UCV, promotora de lectura y del hacer poético, ganadora del premio de poesía para autores inéditos de Monte Ávila Editores con el libro Zoo: Anatomía del insecto (2011).
Su último libro es un compendio que recoge varios de sus poemas. Fue publicado en 2019 para rendirle homenaje a Caneo como poeta y como todo lo que ella fue. Crisálida es el nombre que recibe su antología del Fondo Editorial Fundarte.
07.Sept.2013
Caneo (dibujo del nombre haciendo las veces de un alacrán)
Muñeca de cobre. Alta llama que bordea
la aurora, o diminuta pieza
calzada de arena.
Pienso y ella, como muerta
tuerce su cuello sobre la superficie.
Si pudiera coserle unos hilos
y atarla a mi voluntad.
La haría alzarse, barbilla
arriba, imponente, retadora
(espiral) brazos amplios desplegados
la haría acercarse a mi
y rodearme con su pecho
un abrazo,
Pero ella, ahí quieta,
hecha polvo, ni con agua o tierra
consigo hacer una madre de arcilla
Crisálida: Antologíá Poética (2019)
Caneo Arguinzones te aborda para inundarte en el trance del verso colorido y sensorial. Tiene la facultad mágica de estremecer la palabra. Por sus sentidos, una lupa que explora lo invisible que está ahí palpitante, lo indecible que existe y pasa desapercibido.
Zoo: Anatomía del insecto
Como una niña que observa atenta a los insectos, se muestra Caneo en el poemarío Zoo: Anatomía del insecto. Es el idioma de la contemplación de la naturaleza conjugada con la vida. “Los insectos. Son multiformes y diminutas musas. Su espacialidad, aptitudes y mecanismos.” -dijo la autora alguna vez en una entrevista a Qué Leer-.
Babosa
Detenida mirada cuando al deshojar la legumbre
me hallaste
Babosa auténtica y humana,
amago de mi encuentro con la húmeda tierra
Pienso:
— Un puñado de sal que deshidrate al molusco,
Ver tambiénesta ternura parásita
que ha descubierto.
La poesía debe ser hecha por todos
Deisa Tremarias prologa Crisálida y nos habla sobre Caneo Arguinzones desde la cercanía. Deisa y Caneo eran fundadoras de un colectivo literario llamado Las Fulanas Esas en el que se le daba lugar a talleres de creación literaria y recitales a micrófono abierto en espacios que no eran precisamente académicos como cárceles y comunidades urbanas.
El objetivo de Las Fulanas Esas (y también de Caneo) era la difusión literaria en comunidades pensando en “Abrir espacios a la poesía dentro de las comunidades urbanas de Caracas” para sensibilizar y promover el hacer poético desde cualquier espacio.
Autorretrato
Practico esculpir de mí la humanidad que carezco,
provocar una paulatina ternura hacia el otroEntregarme
Procuro erguirme sensata y voluntaria en la tarea de amar,
no a una multitud,
a otro
Y encuentro en la soledad el mutismo donde reconozco mis rasgos,
sin embargo, en compañía
me desfiguro.
Caneo Arguinzones consiguió atravesarnos con la palabra; ese era su poder. Tuvo la facultad tácita de removernos hasta lo profundo y hoy sus versos enriquecen nuestra historia literaria. Marchó muy pronto, sí, y eso quizá fue pérdida para el arte, pero quedó un rastro bello imborrable.
«Hubiera sido la próxima Miyó Vestrini» –dijo un poeta alguna vez-.