¿Cambia la vida con el nuevo año?
Año nuevo, vida nueva, más alegres los días serán. Año nuevo, vida nueva, con salud y con prosperidad. Estas líneas que seguro leíste cantando (sabes que sí) es una de las canciones más emblemáticas para acompañar nuestras fiestas de año nuevo. Su objetivo es hacernos sentir que el nuevo año trae consigo un cambio significativo, lo cual en sí puede ser muy cierto y sobre todo útil, pero al mirar más de cerca encontramos significados más amplios que nos permiten conducirlos durante no solo más veces durante el año, sino cada vez que queramos.
El 25 de noviembre de 1915, Albert Einstein presentó en la Academia Prusiana de las Ciencias su trabajo sobre la Teoría de la Relatividad. En este trabajo científicamente se demostraba, entre otras cosas, que el tiempo no existe y es más bien una cuestión de percepción de cada persona. Este invento humano llamado tiempo, ha ayudado a nuestra especie a esquematizar y organizar cada vez más la vida en sociedad y con él optimizar la cooperación en masa. Así, todos podemos planificar de forma más sencilla nuestras cosas en calendarios, y también saber a qué hora encontrarnos en el café para ponernos al día con esa vieja amistad.
«El tiempo no existe, nosotros lo inventamos».
Albert Einstein
Los seres humanos somos criaturas muy antiguas. Durante muchos años la práctica de rituales conformó un aspecto muy importante de la cultura y la estructura social. Más allá de todo el ambiente de celebración que se crea en la nochevieja del 31 de diciembre, realmente lo que parece haber es exactamente un ritual, un acto que nos ayuda a dar cierre a un ciclo para abrir uno nuevo que pueda brindar consigo mejoras en nuestra mentalidad, actitud ante la vida, los obstáculos, la salud física, entre otros.
Esto es importante, sí, dar cierre a los ciclos nos permite no solamente renovar en espíritu, sino también practicar el desapego sobre nosotros mismos para permitirnos evolucionar y, así, alcanzar esa versión más auténtica y conectada de nosotros mismos.
¿Cómo utilizar mejor el tiempo?
Lo interesante es que esa renovación de percepción y espíritu que ocurre durante la nochevieja, es pensarla únicamente posible durante esa fecha en específico, cuando en realidad puede ser todas las mañanas, una vez a la semana, una vez al mes, cuando tú quieras.
Dijo Buda Siddhartha Gautama, «el problema es que pensamos que tenemos tiempo». Se me dificulta pensar en algo más verdadero que eso porque nunca sabemos cuándo va a caducar el regalo con el que se nos ha bendecido que es la vida. Sabemos que en algún momento moriremos, pero no sabemos cuándo, es imposible saberlo. Por ello es tan importante utilizar cada día a través de nuestro mayor nivel de consciencia, de trabajo sobre nosotros mismos para conectar a todo nivel con aquellas cosas que nos otorgan un gran nivel de propósito.
Mucho más allá del Año Nuevo y la Vida Nueva, es cada mañana cuando nos levantamos que tenemos una vida nueva con la cual hacer algo para hacer sonreír a alguien y así a nosotros, para aprender algo nuevo o enseñar lo que ya hemos aprendido, para añadir amor y valor en la vida de otros y la de nosotros. Cada mañana que abras los ojos, piensa que este es un nuevo capítulo en la historia de tu vida y virtud de eso decide cuáles palabras, pensamientos y acciones quieres poner en él.