Caracas vestida de Navidad

No hay temporada más sabrosa que la navideña. En diciembre los países del mundo tienen una costumbre en común: vestir sus ciudades de Navidad. Caracas nunca ha sido la excepción. Año tras año el caraqueño se esmera en decorar sus ventanas, calles, plazas y más con adornos alusivos a la época. Recordemos algunas decoraciones que lució la ciudad.

Año tras año las decoraciones con luces de bombilla visten con elegancia y brillo las plazas de la ciudad. Uno de los planes divertidos para los que les gusta admirar la decoración es pasear por la noche por plazas, parques y calles de Caracas. Cada iluminación supera a la otra.

Sabana Grande, por ejemplo, a partir de los años 60 fue tomando estatus como centro de desarrollo comercial, repleto de tiendas, restaurantes y cafés al aire libre. La Calle Real se encendía con las vallas iluminadas en el exterior de las tiendas. A eso, se le suma la decoración navideña entre poste y poste de luz. Un espectáculo para la época.

Años antes, hacia 1940, la tradición era llenar de colores las plazas Bolívar de cada ciudad de Venezuela y recibir allí el año nuevo. En Caracas, la celebración era todo un evento social lleno de elegancia y moda. La gente se reunía en los alrededores de la estatua del Libertador para abrazar a los suyos mientras gritaban el ¡feliz año!.

Para esa misma época, los más pudientes tenían por costumbre celebrar fuera de sus casas. La tradición en ellos era asistir a los clubes para degustar la cena navideña y bailar al compás de la música de orquestas como la Billos Caracas Boys.

Lugares con encanto

Las residencias, edificios corporativos y hoteles de la urbe también aportan su granito de arena año tras año para embellecer las noches caraqueñas. Un ejemplo de ello es la Torre Polar I con su aviso luminoso en la parte superior y el inmenso árbol de luces.

También, el CCCT se robó las miradas de todos los que pasaron por la autopista con la decoración de su fachada: un espectacular San Nicolás en su trineo cargado de regalos llegando a la ciudad. Al principio, la decoración era solo de luces amarillas. Luego, se iluminó con bombillas verdes y rojas.

En los años 80, de la azotea de la Torre Cantv se desprendían extensas cintas de luces que formaban un árbol de navidad. Una decoración sencilla pero de admirar. También, en la misma década, un altísimo árbol amarillo iluminó las noches del Centro Simón Bolívar.

Otras decoraciones han dejado a todos boquiabiertos. El Santa gigante e inflable cargado de regalos ubicado en la sede de Banesco de El Rosal, la iluminación de la Plaza Francia, el casco histórico…

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