Carlos Raúl Villanueva un arquitecto inigualable
Carlos Raúl Villanueva fue un inigualable arquitecto, ¿por qué? Porque él iba más allá de lo bello, buscaba funcionalidad en sus obras. Es decir, se preocupaba por el individuo y cómo el entorno podría afectar o mejorar su calidad de vida.
Pero en sí, ¿quién es Carlos Raúl Villanueva? Más allá de su nacimiento en Londres y su formación en París. Villanueva es el Diablo; claramente no de forma literal; pero como su gran amigo Alexander Calder dijo una vez: “Quien se atreva a hacer este proyecto. Eso de colgar las nubes en el techo del Aula Magna, o tiene un pacto con el diablo o ¡es el diablo!” Y este hombre magnífico, lo logró.
En 1929 decidió hacer su vida en Venezuela, en donde trabajó para el Ministerio de Obras Públicas (MOP). El realizar su vida en este país lleva consigo una historia; aparte de que sus padres fueron venezolanos, principalmente a Caracas la consideraba un espacio en blanco. Es decir, un lugar donde crear y para él Venezuela era todo un juego de luces sorprendente del cual estaba fascinado con su colonialidad.
Su visión sobre Caracas nos permite apreciar lo que nos dejó en ella; reconocible por su grandeza y color. Si observamos con detalle algunas de sus obras, como lo es la Universidad Central de Venezuela o El Museo de Bellas Artes, ambas tienen de fondo el Ávila.
A mi parecer Villanueva no solo se ocupaba de cómo el individuo apreciara su obra, sino que principalmente aprecie con mayor fervor el entorno en el que fue creada.
Lugares como Tierra de Nadie, los Bloques de El Silencio, Nuevo Circo y el 23 de Enero, nos dan la sensación de estar ante algo magnífico. No solo por el hecho de su grandeza; porque a pesar de tener una estructura formidable transmiten calma. Son lugares de interacción social, ideados con la finalidad de mejorar la vida del individuo. De hecho, varias de sus obras tenían como fin que todas las clases sociales tuvieran viviendas de calidad.
La plenitud, comodidad y belleza que nos dejó este gran hombre es admirable, por el simple hecho de que supo entender el medio que nos rodea y combinar sus ideas con las de grandes artistas de renombre. Un ejemplo de ello sería la UCV considerada una “síntesis de las arte” por ser una casa de estudios en donde los estudiantes pueden admirar en todo su esplendor las obras que ésta posee y permitirles sentirse en su propio hogar.
