Harry Abend, el Maestro que esculpió su huella en la integración de las artes

El Maestro Harry Abend supo fusionar un gran talento escultórico en la construcción que hoy día conforma gran parte del patrimonio arquitectónico de nuestra Caracas. Incluso cruzó las fronteras para modificar la silueta de otras ciudades que afortunadamente contarán para siempre con la profunda huella que el arte produce cuando trasciende las barreras de la contemplación y se integra a la funcionalidad.

La madera, el bronce, la piedra y el concreto, figuran entre los materiales que sucumbieron ante su visión forjadora y creadora de sensaciones. Formado en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV, logró proyectar sus obras en variadas exposiciones dentro de Caracas, Valencia, Brasil, Londres y Nueva York. Algunas de ellas aún permanecen en la arquitectura de los edificios de nuestra amada capital.

La triste noticia de su partida el pasado 18 de enero dejó un gran vacío en los corazones del público, que sólo podrá ser llenado con la admiración y el profundo agradecimiento que genera el enorme legado artístico de su autoría. El imborrable camino que trazó comenzó en Yaroslau, Polonia, lugar de su nacimiento en el año de 1937, llegó a Venezuela a los 11 años de edad, y comenzó sus trabajos como escultor a partir de 1958.

Inició su actividad expositiva en 1961, y ya para 1963 obtiene el Premio Nacional de Escultura con la obra Forma. Un año después trabajó en Caracas junto con el escultor inglés Kenneth Armitage y varios jóvenes artistas criollos. Hicieron un taller durante tres meses que finalizó con la exposición Kenneth Armitage y ocho escultores venezolanos en el Museo de Bellas Artes. En 1967 egresó de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV, donde fue discípulo de Carlos Raúl Villanueva, Augusto Tobito Acevedo y Miguel Arroyo.

A finales de esa década e inicios de la siguiente realiza relieves que se integran a la arquitectura de varios edificios caraqueños, entre ellos: la Sinagoga de la Unión Israelita (1969); el Hotel Caracas Hilton, hoy Hotel Alba (1969); la Sala Plenaria de Parque Central (1974); la Sinagoga de la Asociación Beth-El (1974-1975), y el Teatro Teresa Carreño (1980-1982).

Sobre este último, Dietrich Kunckel, uno de los arquitectos del Complejo Cultural, contó sobre la participación de Abend en el proyecto en un texto publicado el año pasado en Trópico Visual: “Por un error en la construcción de la concha de concreto del escenario, vaciada en sitio, se tuvo que corregir el ángulo de inclinación de las paredes en su parte superior, resultando imprescindible revestirlas. Establecimos contacto con el artista Harry Abend, quien había realizado una serie de excelentes obras en concreto. Sus elementos prefabricados, vaciados en encofrados, revestidos de fórmica, fueron la solución elegante y sencilla para cubrir el gran volumen, resultando en un espectáculo visual hermoso”.

Durante 1976 se muda a Londres donde continúa desarrollando sus trabajos en madera y metal y expone en galerías como la Roundhouse Gallery y la Hayward Gallery. Residirá en la capital británica hasta 1982. Por esta época la madera se convierte en su material más empleado. Elabora con ella distintas variedades de ensamblajes constructivo-geométricos: algunos mediante gruesos listones cuya severidad estructural contrasta con su irregular relieve, otros a partir de combinaciones de pequeñas piezas dispuestas en un orden tan riguroso como delicado, los cuales muestra bajo el título Puertas, ventanas y relieves en la Sala Mendoza (1980).​

Ya de regreso en Venezuela, su obra cobra carácter orgánico. Al principio, lo antropomorfo y lo zoomorfo se sugieren a través de la madera; luego ésta (como material) y la talla (como proceso) se convierten en los protagonistas. Las dimensiones pronto se vuelven totémicas con volúmenes ovoides y de pronunciada textura colocados sobre columnas o vigas que reposan en equilibrio o se yerguen en disposiciones de apariencia megalítica. Este trabajo fue mostrado por primera vez en el Museo de Bellas Artes (1989).​

Fue condecorado con la Orden Francisco de Miranda en Primera Clase, en 1990. A continuación, a partir de troncos de árboles talados y desechados por la expansión urbana, los cuales corta en secciones cilíndricas e interviene su corteza en menor o mayor grado, organiza conjuntos escultóricos que presenta en la Galería de Arte Nacional (Caracas, 1992) y la Sala Mendoza (1995). Destaca también en esta época una serie de obras de carácter conceptual en las que Abend introduce en cajas las virutas sobrantes de sus tallas, conformando así una suerte de “esculturas en negativo”, como han sido llamadas.

Abend es reconocido como uno de los Maestros Contemporáneos Venezolanos de más carrera y trayectoria de los últimos cincuenta años. Frecuentemente se le encargaron proyectos de diversa naturaleza e importancia, como por ejemplo la joya (collar de oro con esmeralda en bruto) para la reina y emperatriz de Irán, Farah Pahlaví, en la conmemoración de los 400 años de Persépolis, hasta el diseño y ejecución de la reciente reja perimetral del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela. Abend fue el artista homenajeado en la Feria Iberoamericana de Arte 2009. Según nos reseña Egly Colina Marín Primera.

Algunos afortunados poseen el anillo de graduación que el Maestro Abend diseñó para la primera generación de profesionales egresados de la Universidad Metropolitana en el año 1970. En los últimos años Harry Abend continuó trabajando y exponiendo. En el año 2019, como parte de la exhibición Harry Abend: Lo Inesperado, de la Sala Mendoza, lanzó un libro que recopila su obra en 344 páginas, y que tomó 12 años en llevarse a cabo. Contó con la participación del artista y arquitecto Oscar Díquez, el curador y crítico de arte Víctor Guédez -que ha seguido su obra- y la diseñadora Ira León. Además, este libro se galardonó como Mejor Libro en los Premios AICA 2019.

Ahora es nuestro deber cuidar su legado, que forma parte del patrimonio de todos los ciudadanos. Por su ardua y constante labor, por sus grandes enseñanzas nuestro eterno agradecimiento Maestro Abend. Fue un gran honor conocerlo. Muchos escultores plasmarán la influencia de su obra en nuevas creaciones, y muchas ciudades se verán para siempre vestidas con la sombra infinita que proyectará la transición de su obra.

Para conocer más sobre el legado del Maestro Harry Abend pueden visitar: http://vereda.ula.ve/wiki_artevenezolano/index.php/Abend,_Harry