Eugenio Montejo y su divertida poesía infantil
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Escritor, ensayista y poeta venezolano que manejó el seudónimo de Eduardo Polo. Obtuvo un gran reconocimiento internacional cuando en la «Película 21 gramos», uno de sus poemas fue citado, esa película es del afamado director mexicano Alejandro González Iñárritu. Eugenio Montejo y su divertida poesía infantil.
Nació en Caracas el 19 de octubre del año 1938 y falleció el 5 de junio del año 2008, a los 69 años de edad. Estuvo produciendo en su actividad literaria desde el año 1967 hasta el 2008.
El poema de Eduardo Montejo que el director Alejandro González Iñarritú utilizó en su película “21 gramos” fue el siguiente:
La tierra giró para acercarnos
“La tierra giró para acercarnos,
giró sobre sí misma y en nosotros,
hasta juntarnos por fin en este sueño,
como fue escrito en el Simposio.
Pasaron noches, nieves y solsticios;
pasó el tiempo en minutos y milenios.
Una carreta que iba para Nínive
llegó a Nebraska.
Un gallo cantó lejos del mundo,
en la previda a menos mil de nuestros padres.
La tierra giró musicalmente
llevándonos a bordo;
no cesó de girar un solo instante,
como si tanto amor, tanto milagro
sólo fuera un adagio hace mucho ya escrito
entre las partituras del Simposio”.
Su valoración como poeta y ensayista ha aumentado mucho en las últimas décadas ya que sus obras han sido apreciadas por su originalidad en distintas partes del mundo en la última mitad del siglo XX.
Eugenio Montejo y su divertida poesía infantil
Ganó el Premio Nacional de Literatura de Venezuela en el año 1998 y también recibió el Premio Internacional Octavio Paz de Poesía y Ensayo en el año 2004.
Fue el fundador de la Revista Azar Rey y también participó como cofundador en los inicios de la Revista Poesía de la Universidad de Carabobo. Lo que se convirtió en un asiduo colaborador de un gran número de revistas tanto nacionales y extranjeras.
Se destacó como investigador en el Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos de Caracas. Fue también profesor universitario y en la industria de las letras se desempeñó como gerente literario de la editorial Monte Ávila de Venezuela.
El seudónimo de Eduardo Polo lo utilizaba para sus publicaciones de poesía infantil. Una de sus libros clásicos de este género lleva el nombre de “Chamario” en el cual innovó ya que realiza una ruptura de las convenciones literarias.