Pasado, presente y futuro del llamado de Francisco Pinto por la igualdad social y el respeto cultural

Recientemente el artista plástico Francisco Pinto acaba de mostrar su sexta exposición individual titulada: «Un lugar secreto, sombras en el bosque«, dentro de los espacios del Museo de Arte Africano. Allí Francisco plantea un recorrido a través del dibujo, el collage, la pintura y el ensamblaje, para llegar a la propuesta de una nueva super raza humana que se funde con las herramientas tecnológicas en un proceso evolutivo, rompiendo las cadenas de la esclavitud y venciendo a las atrocidades del colonialismo.

En el 2020 le fue otorgado a Francisco el premio de la residencia artística en Montresso art foundation, el cual quedó en pausa debido a la llegada de la pandemia, en el 2021 se postuló nuevamente siendo seleccionado por segunda vez, la pandemia había retrasado la cristalización de la residencia, pero como dice Pinto: «a la tercera es la vencida, llegó el 2022 y por fin podré ir a esta nueva aventura, muy agradecido con la Directiva de la Fundación: Estelle Guilié y Sanaa Abid».

La residencia artística de Montresso art foundation en el Jardín Rouge en Marrakech, lleva once años apoyando y acompañando la investigación de artistas internacionales. Ocho estudios permiten acoger a una treintena de artistas por temporada cultural, en un entorno recogido, propicio para la experimentación y el diálogo. Centrado en el tema de los territorios, Jardín Rouge es un laboratorio creativo en el que los artistas se benefician del periodo de investigación, pero también de la visibilidad.

El proyecto para la residencia fue titulado: “Ponche de Frutas”, en esta propuesta el artista mezcla material de archivo, la apropiación de imágenes de artistas claves, imágenes nativas con dibujos animados, caricaturas racistas e imágenes de caras negras. Pinto nos habla aquí sobre aquellos frutos que vinieron de los territorios conquistados en América, la condición del hombre frente a la naturaleza y lo sagrado. El culto a los antepasados. El legado africano tal y como se ha manifestado simbólicamente en la diáspora negra presente en América. El cimarrón y su dinámica migratoria contemporánea.

Adicionalmente Francisco Pinto tiene otros proyectos en desarrollo, entre ellos su próxima individual titulada: “De rodillas te pido”, cuyo trabajo nos invita a conocer una reinterpretación de los diablos danzantes, y por si fuera poco, otra aventura se divisa en el horizonte, ya que, a finales de año el artista fue invitado por el Museo de diáspora africana Mocada de Brooklyn a participar junto a un grupo de artistas dentro de Art Basel Miami. Para conocer un poco más sobre cada una de éstas etapas en el recorrido del artista compartimos a continuación la interesante entrevista que con mucha cordialidad nos fue concedida.

El hilo conductor entre sus muestras individuales

Dos de mis individuales siguen el hilo conductor conectándola con mi exhibición reciente. 2018 Libre como la Liebre, rendirse jamás, pim pum pam boom, Museo de Arte Afroamericano. Planteé la vida cimarrona contemporánea, la fundación de los palenques, el monte como contexto de pertenencia de ese sujeto fugitivo que reconfigura su propio espacio geográfico.

Muestro a los esclavos rompiendo sus ataduras. 2018 Freemen: atrápame si puedes, Museo Alejandro Otero. Planteé recuperar la antigua figura del cimarrón como ejemplo de emancipación frente a las fuerzas opresoras, propuse un nuevo y necesario súper héroe para estos tiempos. Éste año 2022 con Un lugar secreto, sombras en el bosque, dentro del Museo Afroamericano, plateo la construcción de una raza, nueva y mejorada, un nuevo mundo donde los estereotipos existentes parecen antiguos y futuristas producto de una evolución, haciéndose eco de las atrocidades de la esclavitud, de la guerra, esos seres humanos desaparecidos y extraídos de sus lugares de origen tras la colonización.

Incorporé prótesis biónicas con la finalidad de restablecer su imagen corporal después de sus amputaciones, aspirando así a una super raza, son a la vez humano y cyborg de esa invención tecnológica, los personajes que emergen son figuras de acción e ídolos intergalácticos. Un recorrido donde pasamos del dibujo al collage, de la pintura al ensamblaje, donde interactuamos con las instalaciones y los objetos descontextualizados, y nos maravillamos con los recientes impresos digitales. Allí, observamos contenido social y cultural, historia y futurismo, identidad y humor, fe y costumbrismo, reclamo y denuncia social.

La influencia de la pandemia en el proceso creador

Sobre mi residencia en el Jardín Rouge de Marrakech, logré ser seleccionado por la Fundación Montresso en 2020.  En ese momento no contaba con una pandemia que paralizaría al mundo entero, esa primera invitación se pospuso, en 2021 vuelvo hacer seleccionado, surgen nuevos obstáculos causados por la misma pandemia, se vuelve a posponer la residencia, 2022 como se dice a la tercera va la vencida ya listo y preparado para partir a esa nueva experiencia dentro de las instalaciones de Montresso Art Foundation las condiciones están dadas, sobre mi proyecto planteo los frutos que vinieron de los territorios conquistados en América, la condición del hombre frente a la naturaleza y lo sagrado.

El culto a los antepasados. El legado africano tal y como se ha manifestado simbólicamente en la diáspora negra presente en América. El cimarrón y su dinámica migratoria contemporánea, mezcle material de archivo, apropiación y reinterpretación de imágenes de artistas claves, dibujos animados, caricaturas racistas e imágenes de caras negras. «La idea es dar voz a otra memoria, a otra iconografía y mostrar otro paradigma», explica Estelle Guilié, directora artística de la fundación.

Sobre su próxima individual (Francisco Pinto y el respeto cultural)

Sobre mi próxima individual De rodillas te pido, parto de la referencia de la obra del maestro Víctor Millán: La casa de los diablos, incorporé  dibujo, pintura, collage, intervención de imágenes de archivo, arte textil, ensamblaje e instalación, quise plasmar un cuerpo de obra donde reinterpreto nuevas versiones sobre esa festividad religiosa Los Diablos Danzantes que se celebra en Venezuela, que es Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, sobre el equilibrio entre el bien y el mal, yo creo que todos los que quieren luchar contra el mal pueden abrigar la esperanza de vivir bajo la gobernación del reino de Dios, comprometido con la erradicación del mal para siempre, el mal será totalmente restringido de modo que no pueda influir en nadie. Por eso el arte es una herramienta de lucha tan importante, porque se encuentra al alcance de todos por igual para expresarse y relatar la historia.

Para mayor información: https://es.wikipedia.org/wiki/Museo_de_Arte_Afroamericano