La historia de El Junquito
Blogger desde 2018. Tattoo enthusiast. Music lover.
La parroquia El Junquito es creada el 8 de junio de 1987, luego que parte de los territorios de Antímano, Macarao y Sucre se unificaran para dar lugar a la Parroquia El Junquito.
La parroquia El Junquito tuvo su génesis en una laguna. Este poblado, ubicado en la periferia de la ciudad capital y que terminó por convertirse en parroquia en junio de 1987, comenzó a ver la luz del mundo a principios del siglo XX, justo donde esta ubicada hoy la Plaza Bolívar.
Javier Meneses, historiador local, señalo que en el espacio donde hoy se encuentra la plaza central, existió el estanque al que ya hicimos mención. Agregó que en sus orillas se detenían a descansar los arrieros y sus animales que viajaban desde las haciendas El Tibrón, Sabaneta y Sanguinas hacia Caracas. Estos personajes trasladaban en mulas y burros el café que se cultivaba en la zona para ser comercializado en la capital. El producto era vendido en los mercados de Mantecón en Catia, Párate Bueno en Antímano y en el de Palo Grande, que estaba situado en lo que hoy se conoce como la avenida San Martín.
«La laguna donde se amarraban los animales estaba llena de una planta que alguien dijo se llamaba junco, las hojas y los tallos, las planticas quedaban corticas por lo que la gente comenzó a nombrar la zona como la laguna de los junquitos» explico el cronista.
A finales de 1920 el lugar tomó un impulso hacia su consolidación como zona poblada, debido a que el general Juan Vicente Gómez se dio cuenta de que la ciudad capital estaba creciendo y necesitaba agua. Cuenta Meneses que uno de los principales reservorios de líquido de Caracas era el dique de Macarao, que se conocía con el nombre de Aguare. Ante esta circunstancia, El Benemérito llegó a un acuerdo con el dueño de la hacienda El Tibrón, el señor Indalecio Padilla, quien a su vez necesitaba mano de obra para las labores cotidianas en su hacienda.
«Gómez desalojó a todas las familias que habitaban en el entorno del dique Aguare y los envió a las cercanías de la hacienda El Tibrón. Con esta medida solucionó dos problemas: mantuvo limpio los alrededores de la represa y le mandó mano de obra a su compadre para la hacienda», agregó. Todas estas familias comenzaron a trabajar como arrieros en las haciendas y, a su vez, se convirtieron en los primeros junquiteños.
En 1930 el general Juan Vicente Gómez abre la primera carretera desde el poblado hasta Caracas y, aunque todavía existían los arrieros, este camino se convirtió en la plataforma que impulsó al poblado a la modernidad.
Cuenta Javier Meneses que a mediados de los años 30 llegó a la zona un hombre de tez morena, fornido que se presumía había viajado a la zona desde alguna ciudad de oriente del país o de la región barloventeña. Esta persona era «muy seria» y fabricó su casa en la cercanías de la laguna que, por cierto, poco a poco fue mermando con el paso del tiempo. Ese personaje se llamó Emilio Castillo.
Meneses recordó que en 1938 el general Eleazar López Contreras fundó la Escuela de Policía, donde se formaban los oficiales de la fuerza pública, lo que originó que por la zona pasaran rumbo a la visita muchas personas.
A Emilio Castillo se le ocurrió montar una venta de cochino frito, destinado a satisfacer al grupo de personas que se dirigía a la academia de policía. El alimento, que era servido en platos de peltre, tenía un sabor muy particular.
«Le comenzó a ir bien y pronto tuvo competencia, hasta el punto que hoy día la manera de preparar este tipo de carne se conoce con el nombre de cochino frito tipo Junquito», destacó.
En 1935 cayó el general Juan Vicente Gómez, pero dejó su legado en la población de El Junquito. Abrio todas las vías que, más que carreteras, eran caminos de tierra. No obstante, cumplían con la función para lo que fueron creadas que era unir el nuevo territorio con la capital.
En una de estas vías (donde hoy está el puesto de comando de la Guardia Nacional Bolivariana, en el kilometro 23) estaba la casa de campo general Isaías Medina Angarita. Allí pasaba los fines de semana y compartía mucho con la gente de la zona, quien lo recuerda como una persona «campesina y de trato llano con la gente».
«EL solía salir de su casa con una cobija en sus hombros. También llevaba una carterita de aguardiente en su bolsillo que compartía con los lugareños, al tiempo que conversaba con ellos», contó Meneses.
Al presidente Medina Angarita también se le recuerda por ser la primera persona que llevó pescado fresco a El Junquito para regalarlo a las personas desposeídas. Se estima que este producto lo traía de La Guaira.
Medina Angarita también solía obsequiar la cobija que se colocaba sobre los hombros a los pobres, cuando salía a pasear por los alrededores. «Lo cierto del caso es que Medina Angarita, aún siendo Presidente, se convirtió en todo un personanje de esta población. La gente lo apreciaba, pues cuando él veía a alguien pasando trabajo con el frío le regalaba una cobija», señalo.
Uno de esos fines de semana cuando Medina Angarita se encontraba en su casa de campo, por esos lares pasaba un señor conocido con el nombre de Jesús «Chuchú» Meneses con un arreo de caballos. Relata el cronista que el general Medina le propuso a Chuchú que le alquilara los caballos para que sus hijos pasearan por los alrededores.
“Jesús Meneses se quedó extrañado, porque eso de alquilar caballos nunca se había visto por aquellos predios y contestó: «Que le alquile mis caballos…bueno está bien» y le dio los caballos», contó el cronista.
Al cabo de un rato, el general Medina le dio al arriero un bolívar con un real (en esa época llamaban a esa cantidad cinco reales) por el alquiler de los equinos. “Eso era un dineral. Medina le dijo a Meneses,»¿usted vuelve a pasar el fin de semana por aquí?». «Si como no, respondió él. Fue entonces como se acostumbraron los amigos y los familiares del general Medina a subir a El Junquito a alquilar caballos y de allí nace la costumbre de subir a ese poblado a alquilar los equinos”, destacó.
En 1944, uno de los principales cineastas del momento, Napoleón Ordosgoiti, le propuso al general Medina Angarita, la que se hubiese llamado Ciudad Cinematográfica, que era una especie de Hollywood en Venezuela, pero antes que se hicieran los planos cayó Angarita.
Como se dijo anteriormente la parroquia El Junquito es creada el 8 de junio de 1987, luego que parte de los territorios de las parroquias Antímano, Macarao y Sucre fueran cedidos, al momento de la delimitación del Municipio Libertador y el Municipio Vargas, la parroquia perdió un área que ahora forma la parroquia El Junko del Municipio Vargas.
En El Junquito, existen varios atractivos turísticos como son los paseos a caballo, las comidas típicas (como las cachapas y el cochino frito), el parque Metropolitano. Muchos turistas de Caracas y de otras regiones del país, llegan al pueblo a caminar entre la neblina, que inunda las tardes de esta zona montañosa caraqueña. Por El Junquito también se puede aquí conectar hacia El Jarillo y a la Colonia Tovar.
Información tomada de Wikipedia y http://caracasciudadplural.blogspot.com/